lunes, 28 de abril de 2008

¿Mito o realidad?


Rumores, historias escandalosas y sorprendentes, varias de ellas increíbles y otras muy bizarras. Lo cierto es que, en más de una ocasión, nos hemos encontrado con algún amigo, pariente o conocido que nos la contó y que, a causa de nuestro fanatismo, no la quisimos creer y mucho menos comprobar.
Acá están, estas son algunas de las mejores historias de los mitos del rock.
Demás está decir que se aceptan historias nuevas.


1) Según dice por ahí Paul McCartney está o ¿Ha estado muerto? Algunas malas lenguas señalan que en la tapa de Abbey Road se ve un auto con una leyenda en la patente que dice “28 IF”.
Esa sería la edad de Paul(si “estuviese vivo”) en el momento del lanzamiento del álbum.

2) Angie Bowie encontró a su esposo David en la cama con Mick Jagger.

3) Mark David Chapman, el asesino de John Lennon dicen que fue formado por la CIA.

4) Los miembros de Led Zeppelin complacieron a una groupie adolescente utilizando un pececito como juguete sexual e introduciendolo… ¡ya saben dónde!

5) La muerte de Jim Morrison es hasta hoy uno de los grandes misterios del rock. En un primer momento se dijo que había muerto de un ataque al corazón en una bañera de París tras una sobredosis de heroína. Más tarde, se dijo que fue asesinado por gente de la administración de Nixon y algunos hasta se atrevieron a asegurar que fingió su propia muerte.

6) Gene Simmons, líder de "The Kiss" se implantó una lengua de vaca luego de un accidente.

7) En un allanamiento en la casa de Jagger, la policía encontró a Marianne Faithfull con una barra de chocolate entre sus piernas.

8)Marilyn Manson se sacó un par de costillas para lograr una autofellatio.

9)Bob Marley fue asesinado por la CIA.

10)Keith Richards necesita diálisis completas periódicamente para poder sobrevivir.

11)Bob Ezrin, el prductor de Berlin de Lou Reed, consiguió los chillidos de niños angustiados que se escuchan en el tema “The Kids” diciéndole a sus propios hijos que su madre había muerto y, posteriormente, grabándolos.

12)Pearl Jam obtuvo su nombre de una jalea de peyote que hacia la abuela de Eddie Vedder, cantante de la banda.

13)Charles Manson audicionó para ser parte de The Monkees.

sábado, 19 de abril de 2008

La gran duda

¿Es o se hace? Todavía no lo descubrí. Cuando habla parece, pero si lo ves caminar no da indicios de serlo. Es raro. Aunque, de a ratos, hace algún que otro gesto de ese estilo tiene ciertas miradas que indican lo contrario.
¿Es o no es?


domingo, 13 de abril de 2008

Recuerdos IV

Y después de casi un año se volvieron a ver. Los tres sentados en una mesa como si el tiempo no hubiera pasado. Cada uno a su manera, con su estilo de vida, pero con las personalidades intactas.
Estaban más grandes, maduros y sinceros. Los sentimientos y pensamientos a flor de piel.
Mirarse y reconocerse, aún hoy, en el otro.
Tantos buenos momentos juntos.

Después de unas horas los dos permanecieron en el centro del lugar. Mirándose a los ojos con la música de fondo y rodeados de personas. Sólo se miraban. Todavía podían reconocerse. Un abrazo cálido(como los de esas noches en la parada del 60) llegó repentinamente para sanar su corazón. Se sintió en paz y protegida. Se reencontró con la persona que alguna vez había sido.
Cerró sus ojos y se aferró fuerte a su espalda. Aunque él no se diera cuenta, soñó durante esos minutos y volvió a aquellos años: dónde no todo era tan difícil y la vida daba más de lo que pedía.

Se despidieron en el mismo lugar de aquella vez. Una escena repetida: los dos corriendo al compás del colectivo. "Llamáme cuando llegues", dijo él. Ella se subió, pidió un boleto de $1,50 y, mientras buscaba un asiento, lo vió alejarse lentamente.
Una vez que logró sentarse, apoyó su cabeza en el vidrio y durmió todo el viaje de regreso a su casa.
Esta vez lo hizo con una sonrisa. Estaba contenta de haber asistido al reencuentro.

domingo, 6 de abril de 2008

Mano a mano (The end)


No existen palabras que describan este momento. No existen canciones que representen mi sentimiento.
Ya no hay nadie en este lugar. Sólo vos y yo y este beso eterno, especial y esperado. Podría sentarme en este mismo sitio y anhelarte veinte años más. Podría ponerme los lentes, una y mil veces, tan sólo para que me los quites de esa forma y me confieses de cerca y en voz baja que te gusta como me veo con ellos.
Ojala pudiera parar el reloj y quedarnos así, exactamente así: acostados, mirándonos a los ojos.

¡Qué importa lo que pase allá afuera!
¿Sabés cuántas veces fantasié esto? Soñaba con estar entre tus brazos y que me acaricies. Te espiaba a lo lejos, mientras vos obviabas mi presencia. Sin embargo mi mente creaba momentos con vos. Soñaba con ser la destinataria de tus miradas y de tus palabras.
Ahora te tengo a mi lado y no pienso dejarte ir.

Te beso. Yo también lo hago por que mi boca sin tus besos se seca. Entonces me besas y me confesás que siempre te gusté.
Tengo ganas de gritar de la alegría. Quiero salir a correr por las calles de este barrio y que los vecinos se enteren de la existencia de este loco amor.
Ahora reina un silencio absoluto en tu cuarto.
Mientras vos dormís salgo al balcón a mirar las estrellas. El cielo está limpio, corre un aire fresco y reconfortante. En cuestión de segundos un destello luminoso cruza el cielo. “Quiero que esta noche sea eterna” ¿Podrías concederme ese deseo? ¿Podría despertar mañana, abrazada a él, en este mismo lugar?
Me acuesto a tu lado tratando de no despertarte. Apoyo mi cabeza en tu pecho, puedo sentir los latidos de tu corazón.

"¿Tenés frío?", preguntás. Me tapas hasta la cintura y me besas en la frente. Tu brazo rodea mi cuerpo.
Yo, cierro los ojos y pienso que si esto es un sueño, entonces quiero imaginarlo por el resto de mis días.

jueves, 3 de abril de 2008

El día que conocí a Susana


Si hubiera sabido que hoy era el día, habría elegido otra ropa para la ocasión. Claro, en el supuesto caso de haberlo sabido. El punto es que no estaba al tanto de lo que iba a suceder y cuando, esta mañana, me desperté para ir a terapia y después al trabajo me puse lo primero que encontré. Mi amiga MJ me hubiera dicho: “¡Ay Ninna, por favor: de punta en blanco!”
Eran las 16:30 PM. cuando la Directora de la Revista llamó para avisar que pusiéramos la redacción en orden.

En ése momento me dirigía a la cocina para hacer unos mates.
Obviamente después de semejante noticia el termo quedó a medio llenar y las galletitas volvieron al mismo lugar de donde habían salido.
Horas más tarde un Mercedes Benz azul estacionó en la cochera y mi jefa descendió de él. Segundos despúes una rubia, súper elegante, bajó por la puerta del conductor, agarró una cartera negra y saludó cuanta persona se le cruzó.
Los gritos de la gente que trabaja en el edificio comenzaron a escucharse a medida que esta mujer se acercaba a la puerta de entrada. En la redacción estábamos todas trabajando de manera muy prolija y silenciosa.
Así fue como la puerta corrediza se deslizó y apareció Susana: la única diosa (y utilizo este termino porque el de diva a ella no le gusta) que hay en este país.
Al verla me quedé pasmada. No sabía si reírme, llorar o agarrar el celular y llamar a mi vieja para decirle que ¡Estaba sentada al lado de la Giménez!
Al verla parada adelante mío pensé: ¿Por qué mierda no me vestí mejor? No importa. Se dio así, de casualidad. Por un lado fue positivo, sino hubiera llegado tarde a mi sesión tratando de elegir algo rescatable en todo mi ropero.
Tres horas. En ese tiempo charlamos, nos reímos, contó anécdotas de su viaje a la India, nos felicitó por el trabajo que veníamos haciendo y hasta me dí el lujo de recomendarle un documental que iba a cambiarle la vida: es un secreto.
Más tarde volví a casa con el tren de Martínez. Al subir, me senté en uno de los pocos asientos que quedaban vacíos y mientras el ferrocarril avanzaba pensaba en lo lejos que estamos(vos, yo, él, ella, el otro; la otra, el de al lado, el de en frente, el de atrás y el de adelante) para llegar a ser la mitad de lo que son estas personas.
Esta noche me voy a dormir contenta ¿Soñaré con ella? no sé, pero si me llama elijo la “Su”.