Verdadero amor

Llegó a su casa repleta de vacío. Sacó su ropa y se puso el pijama. Lo primero que hizo después de eso fue levantar el tubo y llamarlo. Nadie contestó. Ella sabía que se había equivocado, como tantas otras veces.
Tenía bronca, no con él, con ella. Todo lo que pasaba por esos días tan sólo tenía que ver con ella. No se encontraba. Hacía tiempo ya que se había perdido, pero nunca estuvo tan lejos de saber quien era realmente. Quién quería ser en verdad. Iba a los lugares tratando de buscar algo en común y nunca lo lograba. Ahí era cuando se daba cuenta que no estaba tan lejos de parecercele. Eso le daba bronca: verse reflejada en tantas oportunidades. En él hayaba sus mismos movimientos, sus vicios, sus tristezas y alegrías. En él encontraba momentos de paz y de guerra. Significó más que todos, más que nadie. Fue su vida y su muerte. Fue su verdadero amor.