miércoles, 31 de marzo de 2010

You Blow My Mind

Escribilo en servilletas


Me gusta la mar, me gustas tu.

Solo quiero...


No pensarte por un día.
No odiarte por un día.
No extrañarte por un día.
No imaginarte por un día.
No escucharte por un día.
No sentirte por un día.
No buscarte por un día.
No recordarte por un día.
No llevarte conmigo por un día.

No amarte por un día.

sábado, 27 de marzo de 2010

Un hijo no buscado


Está ahí parado en el balcón. Lo miro y pienso en la manera de deshacerme de él.
“A la madrugada cuando todos duermen, lo bajo y lo deposito en la vereda”, le cuento a mis compañeros de trabajo. A una de ellas se lo quise encajar. Me dijo que lo quería, pero ya pasaron casi dos meses desde que me mudé y sigue ahí, parado en el balcón.
La dueña del departamento me lo dejó encargado. “Por favor, lo único que te pido es que me lo cuides. Si querés se lo llevas a tu mamá, pero no lo dejes morir”.Maldigo la hora en que le aseguré que, en mis manos, iba a estar a salvo.
Con mi hermano mayor queríamos llevarlo a la ruta y buscarle un hogar “más ameno”. Después pensamos que con el smog y el humo de los autos, pobre, es mejor que siga viviendo en el balcón. Aunque ya no le alcance el lugar para seguir creciendo. Aunque no se lleve bien con el vecino. Aunque llore o parezca que llore.
De a ratos me olvido de él. A veces lo veo desde abajo y, a decir verdad, le da cierta vida al lugar, pero no puedo ocuparme de él. Gracias que puedo hacer algo conmigo.
Es como si fuera un hijo. Un hijo no buscado que aterrizó. Un forro pinchado, un accidente. Cuando llegué Eugenio ya estaba ahí. Un ficus verde, ahora quasi amarrillo, grande, mejor dicho enorme. Se llama Eugenio. Lo bauticé con un nombre que nunca me gustó.
Eugenio estuvo en el mismo lugar por mucho tiempo. Mucho antes de que llegara yo.
Y ni bien entré lo ví, y no le pude decir que no. Me miraba triste, buscando que lo quieran. Y yo no sé si lo quiero porque no fue buscado, pero tampoco lo puedo abandonar en la vereda de mi casa y salir corriendo.
No puedo. No me da el corazón. Siento que si lo hago voy a tener pesadillas con él.
Voy a darlo en adopción y prometo no buscarlo. Lo prometo.

miércoles, 24 de marzo de 2010

martes, 23 de marzo de 2010

La mujer de hojalata


Nada me toca. Nada me espanta. Ya nada me duele ni me hace llorar.
Nada me asusta. Nada me pesa. Nada me frena ni me hace exaltar.
Nada me persigue. Nada me golpea. Nada me retumba ni me hace recordar.
Nada me despierta por las noches. Nada me crispa. Nada me cierra el estomago ni me hace preocupar.

domingo, 21 de marzo de 2010

Tu no tienes alma


Tú no tienes alma,
Yo no tengo valor para ver como te marchas,
Como si no pasara nada.

Tú no tienes ganas,
Y yo me muero por darte las fuerzas que hagan falta.
Tú no tienes derecho a decirnos adios
Y yo no tengo el derecho a decirte que no,
Si no tienes ganas yo no tengo nada.

Dime si has visto por fin
Que una vida te basta,
Mira, no inventes,
Pasa la gente,
Pasan las cosas,
Pasan tan rapidamente.

Tú no tienes cara de abandonar la batalla,
Y cómo tienes cara,
cómo puedes dejar de mirarnos a los ojos
Como si no pasara nada, nada, nada.

Seguiré inventando,
Sin pararme en los detalles;
Cada día otro motivo pa' esperar el alba.
Seguiré gritando,
que ni el cielo fue bastante,
Pa' olvidarte dame un alma
Que no sepa nada de tus manos.

Tú no tienes alma,
Te abandonas cansada a un destino que te marca.
Tú no tienes la vida más tiempo que yo
Y yo no tengo la llave que cierra el dolor,
Si no tienes alma yo no tengo nada...

Dime si vez por ahí un espacio y te escapas,
Mira no inventes,
Pasa la gente,
Pasan las cosas,
Pasan tan rapidamente.

Harto de oirte decir que la vida es muy larga,
Mira no inventes,
Pasa la gente,
Pasan las cosas,
Pasan tan rapidamente.

viernes, 19 de marzo de 2010

jueves, 18 de marzo de 2010

Charlando con un ex


N: Qué pasa?
L: Nada.
N: Qué tiene de malo?
L: Es raro.
N: Qué es lo raro?
L: Y...hacés box, te gusta un tanguero,¿Estás segura de que estás bien? Querés contarme algo? Redescubriste tu sexualidad?.

martes, 16 de marzo de 2010

Yo así no.

Me despierto, hago el desayuno, limpio, me voy a trabajar.
Llego del trabajo, cocino, ceno, lavo los platos, me voy a dormir.
Me despierto, hago la cama, desayuno, me voy a trabajar.
Llego del trabajo, lavo la taza de la mañana, la juguera, hago las compras, cocino, ceno, lavo los platos de la cena, me voy a dormir.
Me despierto, desayuno, lavo la taza, me voy a trabajar.
Llego del trabajo, hago la cama, cocino, ceno, lavo los platos y me voy a dormir.
Definitivamente, esto de ser ama de casa soltera me está hinchando las pelotas.

sábado, 13 de marzo de 2010

Relaciones peligrosas


Sinceramente no sé que problema tenés conmigo ¿No te gusto?, ¿No te caigo bien?, ¿Es el color de mi pelo? Decime, porque desde que llegué no hago otra cosa que pelear con vos.
Creo que vamos a tener que plantear los puntos flacos en esta “relación” y que de una buena vez por todas me digas que carajo te pasa.
No te aguanto más. No tengo más ganas de ver esa cara larga que tenés. Siempre tan serio y gris ¡Nunca un recibimiento como la gente, che!
Te digo más, si pudiera te echaría a la calle. Te cambiaría por otro. Total, no servís para nada. Ni calentar podés. ¿Por qué acaso podés calentarte? ¡Ves! Te tocó y te apagas, te enfrías.

Me dijeron, además, que sos medio peligroso. No vaya a ser cosa que un día de estos te recalientes y volemos todos por el aire.
Si Rosana, la propietaria, me lo hubiera dicho te juro que no me durabas ni un día adentro de este dos ambientes.

Pero bueno, las cosas son así. Vamos a tener que convivir. Así que, por favor, te pido que te pongas las pilas y te decidas de una buena vez. No puede ser que cada dos días tenga que llamar a Norberto que, a esta altura, ya es como uno más de la familia, esta pequeña familia que hacemos vos, el Ficus del balcón, ahora se le suma la maceta que me regaló Lore y yo.
Te dejo pensarlo ¿Querés? Te dejo solo. Voy a hacer mi bolso y me voy a lo de mi hermano ¡Y sí viejo, no me mires con esa cara! Me tengo que bañar algún día.
Así que vos quedate donde estás y pensá bien lo que vas a hacer porque un calefón que no calienta, para mí, es lo mismo que un hombre que no sabe lo que quiere y de eso, ya estoy hasta el cuello.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Momentos efímeros


A decir verdad, me hubiera gustado que cargaras con mis cajas, valijas y cuadros, que las pusieras en tu auto, como lo hice yo aquel domingo de invierno, que subieras los dos pisos por escalera y me ayudaras a mudarme a esta nueva casa.
A veces, y sólo a veces, quisiera que estes acá viendo el arbol que entra por la ventana de mi cuarto, escuchando mi musica, dejandonos llevar por los sentidos.
De a ratos me invade una extraña sensación. Me nublo, me entristezco y entonces los recuerdos afloran y aquella tarde del mirador se hace presente en mi cocina y comienza a trepar por los azulejos hasta desvanecerse en el respirador.
Es raro que los domingos no me suceda, pero casi siempre encuentro un momento para escuchar los ecos de nuestras risas, esas que quedaron en el jardin de la casa que alquilamos o las palabras desparramadas a lo largo de la ruta cuando escucharnos era lo más lindo que teníamos, lo único que admirabamos.
Con suerte consigo imaginar como hubiera sido todo esto a tu lado. Es que como te dije alguna vez, el miedo más grande que siempre tuve no es quedarme sola, sino olvidarme de tu cara, no volver a sentir tu voz. Algo que, de a poco, está sucediendo.

martes, 9 de marzo de 2010

domingo, 7 de marzo de 2010

Vos


Hay cosas que están escritas. Que son predecibles, lineales, obvias, tan obvias que ya aburren.
Hay cosas que no puedo dejar de ver y otras en las que puedo hacer la vista gorda. Esquivarlas, escaparles.
Hay cosas que nunca van a cambiar, pero yo sí puedo hacerlo; ahí voy y, lamentablemente, en ese cambio... vos no estás.

viernes, 5 de marzo de 2010

Novia fugitiva

Que no te extrañe si un día de estos llamas y no atiende nadie. ¿Sabés que pasa? sufro un desequilibrio que no sé bien cual es su nombre, pero está ahí. Tengo la maldita costumbre de que me gusten las cosas que me hacen mal, mejor dicho "los chicos malos" , y estoy tratando de dejar estos vicios, pero cuestan.
Asique, si algún día tocas el timbre y no te abro, ya sabés. Es que no me llevo muy bien con eso de que me abran las puertas, que me digan cosas lindas y que me traten como a una reina todo el tiempo. Creéme que no está bueno sentir lo que siento, pero me pasa.
Por eso, si alguna vez se te ocurre buscarme por los lugares acordados y no me ves es porque me fui. Me escapé ¡ Sabelo!

martes, 2 de marzo de 2010

Is This LoVe

Convivencia en Tapiales


Pensé que iba a ser peor. La soledad no me disgusta tanto cuando se trata de cenar pastas a la mediterranea mirando la tele. Tampoco cuando hacer la cama y ordenar mi cuarto implica poner la musica a todo volumen y cantar Amy Winehouse como si estuviera en la última entrega de los Grammy. Mis vecinos chochos, sobre todo Matías, mi vecino de piso, que debe soñar con mis agudos matinales y las largas charlas telefonicas que tengo desde mi balcón.
Para ser sincera no está nada mal vivir acá. El unico "problemita" que tengo es con el baño. A decir verdad, no nos estamos llevando bien. Primero, la mochila que no carga agua, después la bacha que gotea y, por último, un caño del inodoro que escupe agua como quien no quiere la cosa. Trato de mirarlo con cariño. Es más, hasta le puse un florerito para que se sienta a gusto con su nueva inquilina, pero no hay caso, che. El baño no me quiere y sospecho que el telefono va por el mismo camino. Se conecta y desconecta cuando quiere y de a ratos hace sonidos extraños. Como si adentro de él viviera un ser de la dimensión desconocida.
En fin, en convivencia con mi nuevo hogar vengo en un 50 por ciento. Quizás, necesitemos tiempo para conocernos. Después de todo, soy nueva en "el oficio de convivir".